Tiritas bajo el pecho

Me acuerdo de ese otoño oscuro
en el que solo brilló tu sonrisa,
en el que solo vi lucir a tus ojos,
ese octubre vacío que tú llenaste
sin más, sin venir a cuento,
apareciendo de repente,
con una decente cama de besos.

Giro, ahora todo gira contigo,
alrededor de ti, tú como eje,
haciendo competencia
a las estrellas con tu ojos,
a la luna con los huecos de tus clavículas
al aire que me rodea con tus brazos,
esos que ondean al compás de las dudas.

Me mantengo firme,
echándote de menos,
ahora sin estar en silencio,
con un megáfono de corazón,
con mil tiritas bajo el pecho
y un cinturón de momentos
que me atan a tu recuerdo.

Tacho días en el calendario,
sin saber el final,
sin saber el principio
de la historia más preciosa
jamás vivida,
esa historia entre tú y yo,
ese lazo que juntos podemos formar
de inmortalidad en el amor.